El día que deje este mundo , no me gustaría que hubiera llanto, ni tristeza en mi funeral, como suele suceder, porque a lo largo de mi vida, disfrute lo que quise disfrutar, fui lo que quise ser, me di la oportunidad de rectificar mis errores, ame a quien me amo y aun a los que no me amaron, me perdone y así pude perdonar a quien me lastimo, disfrute de tener a mis padres, hermanos, familia, amigos... Dios me permitió tener la dicha de ser madre, de ser abuela, de ser amiga de mis hijos de sentirme amada por ellos, me dio una segunda oportunidad en el amor y fui correspondida plenamente en esa segunda oportunidad, la aproveche al máximo, me quite el miedo a decir te amo y ser rechazada, defendí mis ideales, lo que creí era justo, me permití vivir fuera de la violencia, llenar mi vida de paz y armonía lo mucho o poco que viví lo disfrute con intensidad y traté de sembrar semillas en tierra fértil, semillas de amor y de esperanza... Y si alguien pudiera hacer lo que en vida pido, me iría aun mas feliz, porque quiero seguir viva en sus recuerdos y en sus corazones, pero sobre todo me gustaría hacer feliz a personas que nunca sabrán ni mi nombre ni quién fui... Seré un anónimo en su vida, quiero ser donante de órganos, así podré seguir viviendo en alguien mas, no dejen que muera por completo y denme la oportunidad de poder darle alegría y esperanzas a alguien mas, después de muerta, para mi ese sería un final perfecto a mi paso por esta vida. A si que no quiero que estén tristes porque yo estaré bien y en paz conmigo misma. Y mientras alguien me recuerde nunca me iré porque viviré en sus recuerdos.
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